Conocida como la pequeña princesa del Bajo Amazonas, Urucará - un municipio de poco más de 16.000 habitantes- es uno de los lugares de mayor producción de guaraná de Brasil. Muchas familias viven aquí y en otros once municipios amazónicos que son responsables de gran parte del suministro de guaraná que se utiliza en los productos de
Familia Fonseca: una práctica transmitida de padres a hijos
Casados por más de dos décadas, Rosiene Fonseca, de 44 años, y Antonio Carlos Fonseca, de 48, se levantan muy temprano en tiempos de cosecha. “El guaraná es algo muy importante para mi vida”, dice Rosiene, que cultiva esta fruta desde hace 15 años. Con lo que ganan, la pareja pudo educar a sus hijas, renovar la casa y comprar un automóvil.
El año pasado, desde las tierras urucaraenses -a través de la cooperativa-, salieron 25 toneladas de guaraná para la producción de
Familia Monteiro: el hombre guaraná
Conceição Monteiro, de 63 años, es conocido como el "hombre Guaraná". El apodo se puede explicar en números: sus 2 mil “guaranazeiros” producen 1,7 toneladas de fruta. “Antes pasábamos casi ocho horas para tostar 50 kg de guaraná. Pero desde que pudimos comprar la máquina, ahora el trabajo lo hacemos en cinco horas. Nuestra vida ha mejorado 100%”, celebra.
Guaraná, el Papá Noel de Amazonas
El desarrollo de las familias productoras es seguido de cerca por João Carlos Santos, agrónomo y experto en agricultura para el Amazonas de
El guaraná que sale de las tierras de los productores involucrados en el programa se dirige a todo Brasil y se exporta a cinco países latinoamericanos a través de los productos de la compañía: Uruguay, Paraguay, Colombia, Venezuela y Bolivia. Un trabajo que va mucho más allá de las relaciones comerciales. Con el programa “Ojos del Bosque”, creado en asociación con la ONG Imaflora, desde 2016,
“Papá Noel de Urucará es una planta de guaraná, porque cuando llega la cosecha, llegan los resultados del año. ¡Eso genera mucha alegría! Después de todo, los productores saben que la vida está garantizada. Incluso la Navidad aquí se celebra con una bebida fría de guaraná en la mesa”, dice João Carlos.
Redes Sociales